El verano está aquí para North Carolina, y con el tiempo más cálido viene un aumento de las lesiones en el lugar de trabajo. La demanda de trabajos al aire libre, como la construcción o el paisajismo, aumenta el riesgo de estos puestos de trabajo intensivos.
A estudio de la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS) reveló que la mayoría de los accidentes laborales se producen en junio, julio y agosto. La mayoría de las lesiones conllevan también una reclamación de indemnización por accidente laboral.
En North Carolina, el calor creciente puede causar muchas de estas lesiones. Los jornaleros y artesanos deben trabajar bajo el sol de North Carolina, lo que aumenta su riesgo de insolación y exposición. Alrededor de 400 personas mueren cada año por exceso de calor natural. Estas muertes, como la mayoría de las relacionadas con el calor, son evitables con los cuidados, la hidratación y la educación adecuados.
Afortunadamente, las lesiones relacionadas con el calor representan una pequeña parte de las lesiones laborales. La mayoría de las lesiones se producen por protección inadecuada, equipos defectuosos o resbalones y caídas. Los tipos más comunes de lesiones laborales en verano, por porcentaje, son:
Además, la mayoría de las lesiones se producen en dos supersectores de empleo: educación y servicios sanitarios; y comercio, transporte y servicios públicos. Casi la mitad (49%) de todas las lesiones y enfermedades profesionales se producen en estos sectores, aunque sólo representan 38% del empleo privado. La naturaleza física de estos sectores exige más del cuerpo del trabajador, lo que aumenta el riesgo de lesiones.
Los empresarios no solo quieren a sus trabajadores sanos y enteros para su bienestar, sino que también ayuda a la cuenta de resultados. En 2017, el Consejo Nacional de Seguridad informó de que los costes de las lesiones en el lugar de trabajo ascendieron a $161.500 millones. Estos costes incluyen gastos médicos, salarios perdidos, disminución de la productividad y otros cargos del empleador. Sin embargo, esta cifra no tiene en cuenta los costes adicionales de las lesiones de los empleados, incluida la formación para los sustitutos, las horas extraordinarias y los problemas relacionados con el estrés en la moral de los empleados.
Los empresarios pueden ahorrar tiempo, dinero y la salud de sus empleados proporcionándoles recursos de seguridad y formación adecuados. Invertir en equipos de alta calidad y sustituir las herramientas anticuadas puede evitar elevados costes médicos tras una lesión. Los empleados a los que se deniegue una indemnización pueden ponerse en contacto con un abogado local familiarizado con la compensación de los trabajadores para recurrir la decisión y conseguir el tratamiento necesario.